Leonardo Reyes Bozo: requisitos para avanzar en electromovilidad y una transición energética justa

Leonardo Reyes Bozo: requisitos para avanzar en electromovilidad y una transición energética justa
Doctor Lorenzo Reyes Bozo (Decano Facultad de Ingeniería, Director Grupo de Investigación en Energía y Procesos Sustentables de la Universidad Autónoma de Chile)

Los avances de las baterías posicionan al litio como un actor clave de la industria. Chile no cuenta con ventajas competitivas y las regulaciones apropiadas para instalar una empresa productiva que permita dar valor agregado al litio y transformar a Chile en un actor clave en la electromovilidad.


Doctor Lorenzo Reyes Bozo (Decano Facultad de Ingeniería, Director Grupo de Investigación en Energía y Procesos Sustentables de la Universidad Autónoma de Chile)

                                                            Chile posee un potencial renovable de energía que alcanza los 2.319 GW, considerando solo las tecnologías solares y eólicas. Sumado a ello, cuenta con potencial renovable en sistemas hídricos, geotermia, energía asociada a mares, entre otras.

La calidad y cantidad de energía renovable permitirá el desarrollo de una economía más sustentable y basada en la explotación de estos recursos. Para hacer gestionables estas fuentes de energía, es necesario avanzar en su almacenamiento, de modo de equiparar la oferta y la demanda energética. Para esto existen distintas alternativas tecnológicas para cumplir este propósito, como las baterías y el desarrollo del vector energético hidrógeno verde.

Los avances de las baterías posicionan al litio como un actor clave de la industria. Chile no cuenta con ventajas competitivas y las regulaciones apropiadas para instalar una empresa productiva que permita dar valor agregado al litio y transformar a Chile en un actor clave en la electromovilidad.

Para el desarrollo de la economía del hidrógeno, será necesario avanzar en la atracción de inversiones, la transferencia de tecnologías habilitantes para explotar el potencial renovable de Chile, implementar estándares y regulaciones, formar el capital humano y, debido a la envergadura de estos proyectos, considerar el trabajo con las comunidades.

Así, es necesario construir instrumentos económicos habilitantes que permitan el desarrollo público y privado de la industria, además de vincular la investigación e innovación con universidades y centros de investigación que permitan la inserción de nuestras materias primas en la cadena de valor de la electromovilidad.

Desde la mirada económica, la teoría y la evidencia indica que una buena institucionalidad económica explica en forma importante el crecimiento, el desarrollo y la prosperidad en los países. El consenso es que una buena institucionalidad se refiere a reglas del juego claras y que se respetan, en particular, en lo que se refiere a los derechos de propiedad y la existencia de mercados competitivos. También se necesita avanzar en la integración de mercados y modelos de negocios que permita a Chile jugar un rol clave en la electromovilidad y la exportación de energía limpia a través del hidrógeno verde y sus derivados.

El Estado debe jugar un papel importante en la industria de la energía, que permita dar valor agregado a nuestros recursos, estableciendo políticas públicas neutrales desde el punto de vista tecnológico, de modo de avanzar en la eficiencia productiva -lo cual implica producir bienes y servicios al mínimo costo- y en la eficiencia dinámica que se oriente a establecer los incentivos apropiados para que exista inversión e innovación en el largo plazo. En la transición energética, la industria minera y el almacenamiento de energía en el vector hidrógeno, jugarán un rol fundamental para avanzar en la electromovilidad y la transición energética justa.

 

(El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de Séptima Página Noticias).