Eduardo de la Fuente Ceroni: Los atractivos turísticos pueden alentar la economía local, Linares pierde gratuitamente uno

Eduardo de la Fuente Ceroni: Los atractivos turísticos pueden alentar la economía local, Linares pierde gratuitamente uno
Escuela de Artillería de Linares.

Tenemos un museo, el de Arte y Artesanía, pero podríamos tener dos, el actual y el de la artillería chilena. Imaginemos un museo militar de pago al que cualquiera pueda visitar, donde las armas tengan asociadas una detallada descripción de su uso y funcionalidades, con material interactivo y visual donde se pueda apreciar su funcionamento; museo que con el tiempo se puede enriquecer con armas hoy día regadas por parques, plazas y regimientos de todo el país, también - y desgraciadamente algunos de estos objetos - sin mucha pena ni mucha gloria.


Por Eduardo de la Fuente Ceroni (ingeniero civil electricista de la Pontificia Universidad Católica de Chile)

                                                                                                  Con sólo observar en el mundo noticias, documentales, cine y recorrer la internet, resulta posible comprobar que los museos de cualquier tipo son uno de los principales atractivos para los viajeros de todo el mundo.
Cualquiera que circule por la avenida Presidente Ibañez se da cuenta que frente a la Escuela de Artillería hay una cantidad importante de cañones antiguos de distinto tipo, que reposan sin pena ni gloria en un espacio al que nadie puede acceder y en el cuál tampoco se realizan actividades militares.
Este atractivo material, que en su tiempo tuvo un alto costo para todos los chilenos, hoy día no presta beneficio social alguno para Linares y el país. Los museos militares son numerosos en el mundo y atraen miles de visitantes, curiosos por entender mejor la tecnología pasada y actual de las armas de un ejército, ámbito en el cual el arma de la artillería mantiene sin duda un lugar central.  Arma de artillería cuya matriz nacional se encuentra históricamente en Linares, aspecto que en realidad no pasa más allá de ser un dato más de la causa.

Tenemos un museo, el de Arte y  Artesanía, pero podríamos tener dos, el actual y el de la artillería chilena. Imaginemos un museo militar de pago al que cualquiera pueda visitar, donde las armas tengan asociadas una detallada descripción de su uso y funcionalidades, con material interactivo y visual donde se pueda apreciar su funcionamento; museo que con el tiempo se puede enriquecer con armas hoy día regadas por parques, plazas y regimientos de todo el país, también - y desgraciadamente algunos de estos objetos - sin mucha pena ni mucha gloria.

No resulta lógico pedir al Ejército chileno que destine sus recursos para desarrollar esta iniciativa, pero sí es posible pedirle que colabore en su concreción en pro del desarrollo de Linares. El museo se puede financiar con erogación popular, fondos municipales, fondos regionales, una combinación de todos estos e incluso con aportes de los sectores económicos que se verían beneficiados con la afluencia de turistas; es decir, hoteles, restaurantes, comercio y otros.
Lo descrito dista mucho de ser una tarea titánica e inalcanzable, sólo requiere de voluntad, iniciativa y verdaderas ganas de impulsar el desarrollo de Linares, misión por otro lado que le es propia a la planificación municipal.

(El contenido vertido en esta columna de opinión es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial ni postura de Séptima Página Noticias).